Revelan 7,000 Negativos: El Rulfo Desconocido que Capturó el “México Profundo”
Juan Rulfo, universalmente aclamado como uno de los escritores fundamentales del siglo XX, guardaba una faceta secreta, y no menos brillante: la de fotógrafo. Durante décadas, el autor de Pedro Páramo y El Llano en llamas documentó rigurosamente con su lente el México que le tocó vivir, un archivo que permaneció oculto para el gran público.

La vasta mayoría de su obra visual, capturada en blanco y negro, se centró en el paisaje posrevolucionario, retratando el “México profundo”: sus pueblos, los escenarios rurales desolados, la pobreza inherente y la profunda soledad que impregna tanto sus letras como sus imágenes.
La Separación de Mundos
Rulfo trazaba una clara distinción entre sus dos disciplinas creativas, declarando: “Para escribir tengo que imaginar. La realidad no me dice nada literariamente, aunque pueda decírmelo fotográficamente.”

El Legado que Salió de las Cajas de Zapatos
A pesar de su maestría visual, Rulfo nunca recibió formación académica en fotografía. Él mismo minimizaba su técnica, afirmando con humildad: “simplemente tenía buena puntería y eso es todo, no hay otra historia”. Solo su círculo más íntimo de amistades conocía de la existencia de este prolífico acervo.

Tras el fallecimiento del escritor, la magnitud de esta obra quedó al descubierto de manera fortuita: casi 7,000 negativos fueron hallados en cajas de zapatos apiladas en un cuarto de su azotea.
Hoy, es su hijo, Juan Carlos Rulfo, quien se ha encargado de la ardua labor de organizar, catalogar y difundir este invaluable archivo, permitiendo que la “otra mirada” de Juan Rulfo finalmente sea conocida por el mundo.
