jue. Dic 25th, 2025
Comparte si te ha gustado

Llega a la plataforma Max “Autos, Mota y Rocanrol”, el nuevo largometraje de José Manuel Cravioto que disecciona el mito de Avándaro. Más que una crónica musical, la cinta explora aquel festival de 1971 que desafió el espacio-tiempo para convertirse en el emblema definitivo de la liberación juvenil frente al autoritarismo del México echeverrista.

El nacimiento de un hito
Lo que originalmente se planeó como una carrera de autos en Valle de Bravo terminó transformándose en un fenómeno social sin precedentes. En un país que aún sangraba por las heridas de la represión estudiantil de 1968 y 1971, más de 100,000 almas peregrinaron hacia el Estado de México para reclamar un espacio de libertad.

El cartel, hoy legendario, reunió a las figuras que el sistema etiquetaba como la “perversión de la juventud”:
Los Dug Dug’s
El Ritual
Peace and Love
Three Souls in My Mind (la génesis de El Tri)
Tequila y El Epílogo

Una apuesta por la calidad y el riesgo narrativo
Se agradece que la industria nacional apueste por narrativas que se alejan de la comedia genérica y los repartos convencionales. Cravioto logra un equilibrio sólido entre la percepción histórica, la ambientación de época y un ritmo dinámico.

Sin duda, la “cereza del pastel” es el uso del falso documental (mockumentary). Este recurso no solo le otorga un aire de frescura, sino que permite jugar con la sátira y la nostalgia de una manera extraordinariamente divertida y efectiva.
La estética de la “degeneración”

La producción destaca por un diseño de arte y vestuario excelso, capturando el choque cultural de inicios de los 70: la pulcritud de los “buenos valores” impuestos por el Estado frente a la estética rebelde de “los mugrosos”.

La película recupera la estridencia de una prensa oficialista que, en aquel septiembre de 1971, sentenciaba el evento con titulares cargados de pánico moral:

“Encueramiento, mariguaniza, degenere sexual, mugre, pelos, sangre y muerte”.

Autos, Mota y Rocanrol no solo recrea un concierto; recupera la memoria de un México que intentó ser silenciado y que, a través del rock, encontró su propia voz.


Comparte si te ha gustado
Avatar photo

Por Vish Fernandez

Columnista en portal de noticias de Guadalajara y CDMX. Gestor cultural, ganador de reconocimientos locales, nacionales e internacionales y promotor de la lectura.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *