Es común sostener que lo humano implica excepción en la naturaleza. Esta idea se ha construido a lo largo de la historia a través de diversas teorías filosóficas, jurídicas o religiosas. Estas han elaborado una serie de creencias para justificar que lo humano es una condición superior al resto de lo viviente.
Sin embargo, esta excepcionalidad no siempre incluyó a todos los humanos. En la historia es posible percatarse de grupos de humanos que elaboraron supuestos para ser vistos como superiores al resto.
El ejemplo más notable de este hecho es la institución de la esclavitud. Los esclavos/as no solo eran reconocidos socialmente como cuasi-humanos, sino además eran juridificados como “cosas”.
Y como cualquier objeto inanimado, ellos/as podían padecer maltratos extremos, incluso ser destruidos, sin que esto tuviese una sanción moral o jurídica sobre el dueño.
Para mantener la creencia sobre la “excepción humana”, sobre todo del supuesto de la excelencia moral y dignidad, se crearon leyes anticrueldad o “tratamiento humanitario” para los esclavos con lo que se impedía la deshumanización de los esclavistas.
Por eso algunos emperadores y juristas elaboraron una serie de disposiciones legales para aliviar la situación de los esclavos que eran víctimas de tratos violentos y crueles.
Muestra de estas disposiciones son: i) Un edicto del emperador Claudio (años 41-54 d.C) que prohíbe al dueño abandonar esclavos viejos o enfermos; ii) Antonio el Piadoso equipara la muerte de un esclavo a un homicidio (Bialostosky S, 2007: 46), iii) A su vez, este mismo decretó la venta obligada de los esclavos maltratados por su dueño, con prohibición de que este volviera a comprarlos (Beltrán J, 2006: 181).
Es evidente que estas leyes solo mitigaron castigos, maltratos y abusos hacia los esclavos. Era preciso des-objetivarlos, es decir, que dejaran de ser cosas y fueran reconocidos jurídicamente como sujetos de derecho, para terminar con estos suplicios.
No obstante, en la modernidad “la excelencia humana”, creó un truco para invisibilizar y negar la conexión existente entre la función de la esclavitud humana y la de otros animales no humanos. Con ello cerró la posibilidad de des-objetivar a estos últimos.
La esclavitud implica la permisión jurídica de un conjunto de acciones por parte del propietario sobre su posesión, ya que el vocablo servus designa al esclavo, al que sirve, al que es útil e instrumento de adquisición de riqueza.
Además, en las ciudades griegas era frecuente que una única y misma ley se aplicará a esclavos y animales (Thébert Y, 1991: 166), esto explica la creación de leyes anti-crueldad para los animales al igual que para los esclavos, como ha sucedido en el caso de lo animales denominados “ganado”.
En 1822 por ejemplo se aprobó en Reino Unido “An act to prevent the cruel and imporper Treatment of Cattle” (Ley para prevenir el trato cruel e inadecuado del ganado), también conocida como Ley Martín.
En suma, las leyes anticrueldad para los animales bajo la sombra de la “excepción humana”, hoy resultan, como lo fue en el tiempo del esclavismo, prácticas organizadas que se emparejan con la humillación, porque tratan de justificar el abuso, crueldad y eliminación de millones de vidas que quieren vivir.
Temas relacionados: La obsoleta y cruel experimentación con animales.
Bibliografía:
Bialostosky S, (2007) Panorama del derecho romano, México: Porrúa.
Beltrán J, (2006) Prontuario elemental de derecho romano y sus fuentes, México: Porrúa.
Thébert Y, (1991) “El esclavo”, en Giardina A, El Hombre romano, Madrid: Alianza.
Excelente artículo. Me gustaría que la autora expusiera los avances legales en contra el maltrato animal en México y los supuestos jurídicos para enjuiciar a los victimarios. Por ejemplo, el caso en torno a los perros Athos y Tango víctimas del maltrato animal.
Gracias por la información y la concientizacion
Para apoyar a estos seres indefensos
Tal como la historia nos ha enseñado, que algo sea respaldado por las leyes, las costumbres o las instituciones no lo hace necesariamente correcto. En el caso de los animales no humanos, las regulaciones y criterios de bienestar, como aquellas que han derivado en los llamados productos «libres de crueldad», son solamente intentos por disfrazar el trato que ejercemos sobre ellos, y que sabemos que es incorrecto.
Totalmente de acuerdo Frank
Habrá que escribir críticamente sobre la mal llamada “carne humanitaria”
Gracias por tu comentario
Totalmente de acuerdo
Habrá que escribir críticamente sobre la mala llamada “carne humanitaria”
Pese a las crisis sanitarias y climáticas, donde hemos visto que esa “excepción” no existe naturalmente, el humano sigue cegado por su sentimiento de superioridad. Esa “excepción” le ha dado al ser humano no solo la libertad de abusar y maltratar a los animales, sino también de modificar completamente sus comportamientos, su hábitat y la manera en la que ellos se relacionan con el mundo y entre ellos. ¿Solo podemos esperar que en algún momento alguna crisis haga evidente que la excepción humana debería superarse como justificación a nuestro comportamiento y decisiones sobre los otros?
Tengo la certeza que así como se logro eliminar el maltrato por los seres humano se llegará a logar la pena de muerte al humano que abuse de su superioridad ante los seres no humanos.
Me agradó este artículo.
Excelente artículo. Es imprescindible que deje de ser legal la tortura y explotación animal.
Excelente columna. Los animales no humanos necesitan que se les reconozcan sus derechos como seres sintientes y quitarles el estatus de objetos. ¡No necesitan más leyes anticrueldad!
La esclavitud de los humanos ha adquirido formas modernas pero no ha desaparecido. Existe en muchos lugares o situaciones. De igual manera, la falta de empatía o el carácter sádico o económico sigue manifestándose incluso en forma cada vez más cruel que en la antigüedad con los animales. En lugar de reconocer sus derechos, cada día se les trata con más violencia.
Es importante que se establezcan leyes justas sobre el trato a los animales para detener a estas personas enfermas.
Ojalá llegue el día que no exista ninguna forma de esclavitud y dejemos de aumentar el sufrimiento innecesario de humanos y no humanos
Este artículo sin duda también nos invita a reflexionar muchas veces la concepción de “más humano” que se ha utilizado para enfatizar que algún trato/actitud debería de ser más consciente, empática. Pero ¿qué significa eso realmente? ¿Existe? Cómo bien se ha plantado aquí las opresiones continúan y es algo que no podemos olvidar ni deja de señalizar tanto para los animales humanos como para los no humanos.
Exacto Paulina lo “más humano” no necesariamente significa “lo mejor”. Tenemos que dejar de usar ese término como excelencia y darle una dimensión más real. Lo humano también puede significar : ser crueles o indiferentes.
Tan breve como interesante. Especialmente cuando a la evidencia de la “excepción humana” se le desprende un objetivo ineludible: desobjetivar a los otros animales.
¡Excelente nota! Definitivamente nos queda mucho camino por recorrer pero estas reflexiones nos ayudan muchísimo.