Un total de 123 presos se graduaron dentro del Centro Educativo Refundación Jalisco, con ello consiguieron una herramienta importante para integrarse a la sociedad, y una nueva oportunidad de vida.
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Si un preso fallece, ¿a qué tiene derecho?
La actual administración de la Dirección General de Prevención y Reinserción Social del estado de Jalisco, ofrece esta oportunidad a las Personas Privadas de la Libertad (PPL), que les ayuda a cumplir la condena y superarse a través del estudio. Todos los graduados obtienen el certificado correspondiente y reconocido por la Secretaría de Educación.
A los graduados quienes tuvieron su acto académico el pasado 25 de agosto, se les debe reconocer su logro y que son personas que quieren salir adelante.
Con el apoyo del director del reclusorio obtuvieron las herramientas en diferentes actividades, para que el día que cumplan condena estén preparados para su reintegración dentro de la sociedad.
Entre las herramientas esenciales que han contribuido a cambiar sus vidas están los talleres, la atención psicóloga, conocimientos en diversas disciplinas, y la oportunidad de estudiar y trabajar para que puedan mantener a su respectiva familia.
La mayoría de las PPL, no tuvieron las facilidades de una educación y vivieron dentro de una familia disfuncional. Aunado a que si no salen en las listas de ingreso de una institución pública y no tienen dinero para pagar a una escuela incorporada, no terminan sus estudios, y la falta de oportunidades es mala consejera.
Algún día no muy lejano, será posible que los que estudiaron en la cárcel, no cuenten con antecedentes penales, sería un gran logro, porque ya cumplieron condena, ya le pagaron a la sociedad.
Mi reconocimiento al Director General de Prevención y Reinserción Social, a la
Coordinadora General de Educación del Sistema Penitenciario y Director de
Formación para el trabajo del Centro Educativo Refundación Jalisco, así como a los graduados.